por Arianna de Sousa-García.
De los absolutos se sabe todo, no hay nada que no digan por sí mismos. Es en los grises donde se desarrolla lo interesante, todo lo que se aleja de posturas fijas, donde hay espacio para el movimiento, las posibilidades, la reflexión e incluso la agitación.
Gris Tormenta, la editorial mexicana llevada por Mauricio Sánchez y Jacobo Zanella desde hace cinco años, imagina, edita y publica libros que indagan en la cultura y el pensamiento contemporáneos y cada uno de los títulos de sus dos colecciones, Disertaciones y Editor, se desarrollan en torno a una idea a la que se mira desde diversas perspectivas para ampliar y profundizar las discusiones.
A propósito de su visita a Santiago y al Espacio Literario y gracias a la gestión de la distribuidora de editoriales independientes Big Sur, conversamos con Sánchez sobre autonombrarse, el trabajo y las maneras de despertar el amor por la lectura. Esto nos dijo:
Gris tormenta se define como un taller editorial, ¿nos cuentas al respecto de esa decisión?
“Inventamos” los libros que publicamos antes de que existan, es decir, nos imaginamos un libro terminado, cómo se va a leer, con qué intenciones, y luego vislumbramos cómo llegar a ese momento. No recibimos manuscritos, sino que buscamos o comisionamos textos que puedan lograr que nuestra idea se exprese en libro. Por eso lo de “taller editorial”, porque hay un trabajo continuo, minucioso e invisible, antes de que un texto y un libro llegue a existir. Se modela.
Las editoriales suelen gustar de dar a conocer nuevas voces, sin embargo la apuesta de Gris tormenta ha sido profundizar en temas desde lo colectivo, ¿cómo llegaron a este planteamiento o mirada?
En casi todos los momentos de la historia del libro ha habido esta sensación de “demasiadas voces”. Hoy lo sentimos: la cantidad de novedades, de escritores, de editoriales, de agentes, de nuevas traducciones, etcétera, es imposible de seguir. Una voz extraordinaria, inmortal, es realmente rara: una o dos por generación, no mucho más. Nosotros no estamos interesados en encontrar esa rareza, es demasiado improbable. Se gasta mucha energía en el intento, y en el camino aparecen editoriales que nunca la encuentran, generando solo catálogos regulares o malos. Nosotros vamos en el sentido opuesto: conceptos antes que autores; exploración de ideas antes que “revelaciones”. Es por eso que Gris Tormenta está estructurada en colecciones antes que títulos, y es así como aparece nuestra colección Disertaciones, en donde, alrededor de una interrogante con relevancia contemporánea, reunimos textos multiculturales que se transforman en una experiencia de lectura coral. A veces usamos textos o fragmentos de textos que ya estaban publicados en otro lugar y que al traerlos a Gris Tormenta con una intención bien particular, adquieren nuevas capas de significado; a veces traducimos por primera vez algo que no existía en la lengua y nos funciona para nuestra “tesis”; otras veces comisionamos piezas directamente a autores (famosos o no) que tengan que decir algo al respecto.
Entendiendo que lectores, autores y editores miran al libro desde ángulos diferentes, ¿cómo ha sido la recepción de la colección Editor por estos sectores?
Creo que no fue nuestra intención, pero el catálogo de Gris Tormenta tiene como lector primordial a todas las personas alrededor del libro: desde autores y traductores hasta correctores, editores, distribuidores, agentes, gestores, etcétera. Ese es nuestro público natural. No lo planeamos, pero nos gusta que sea así. Creo que para ellos, la lectura de nuestros libros funciona como un espejo: pueden ver el mundo del que son parte. Pues al final nuestros libros, vistos desde más arriba, son como un intento de definir qué es una editorial hoy, qué es un libro y un escritor hoy, cuáles pueden ser sus posibilidades.
¿Crees posible despertar el amor por la lectura desde el tras bambalinas?
Totalmente. Nunca volví a leer a Piglia de la misma manera después de ver sus clases de literatura por primera vez en la televisión y de conocer su voz y su lucidez oral. Leo sus libros después de eso y es otra cosa, otro gusto: parecen leídos en voz alta por él. Me hace mucho más sentido todo. El mayor conocimiento de algo o de alguien propicia un entendimiento mayor, la posibilidad de acercarse de manera mucho más cálida y personal.
Te gustaría que los libros Gris Tormenta fuesen vistos como __________________.
Nos gustaría que cualquier libro de Gris Tormenta fuera sinécdoque de toda la editorial. Que quien lea uno sienta que puede leer todos los demás por afinidad.
Recomiéndanos un proyecto editorial que te encante y cuéntanos lo que te gusta de él.
Recientemente conocimos el Hilo de Ariadna y nos gustó mucho, es una editorial que no publica novedades. Nos llamó la atención que descubrimos una intención editorial que no tiene nada que ver con el mercado, lo cual la hace una verdadera editorial independiente. En ese mismo camino está Eterna Cadencia, creo que ambas coinciden en lo mismo: poseen una intención editorial muy clara y contundente.